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COSTA DE LUGO

LA MÁS DESCONOCIDA DEL LITORAL ESPAÑOL

La costa de Lugo es una de las más inexploradas y de las menos turísticas de todo el litoral español, y eso le da un carácter diferente e interesante. Forma parte de las rías Altas, que turísticamente se comercializa también como la costa del norte de Galicia.

Ubicada en una pequeña porción de Galicia, al norte de la extensa provincia lucense, y entre la costera provincia de La Coruña y la portuaria y preciosa Comunidad de Asturias se encuentra esta pequeña joya de la costa atlántica.

 

El reclamo turístico principal de esta zona es la playa de las Catedrales, una playa con rocas moldeadas y escarpadas por el mar, pero esta costa tiene mucho más por ver. Para acceder a esta costa no es tan sencillo, puesto que no hay grandes aeropuertos, ni buenas conexiones por tren desde grandes ciudades como Madrid, Zaragoza o Valencia. Por carretera se podrá acceder desde las regiones aledañas costeras como País Vasco (Bilbao), Asturias o Cantabria a través de carreteras como la A-8 o la N-642. Desde Madrid se puede acceder a estas carreteras tomando la A-6/ AP-6 para conectar luego con carreteras secundarias, una buena opción si se quiere ir viendo el paisaje y pueblos interesantes de Castilla y León y Galicia durante el recorrido. Al llegar, a lo largo de esta costa lo que más llama la atención es la poca explotación turística que hay (apenas hay grandes hoteles, restaurantes, centros comerciales, casas de veraneo, etc.), y esto es algo impensable en España (prácticamente el resto de costas están sobre-explotadas y con grandes infraestructuras y ocio construidos en todas las costas). También llama la atención la vegetación salvaje y verde que cubre la costa, con altos y frondosos árboles, arbustos, playas que son mezcla de arena fina y rocas… Pero, ¿Qué ver en la costa de Lugo?  

Ridadeo: pueblo señorial con arquitectura indiana en el límite con Asturias. Cruzando el puente que separa ambos lados gracias a la ría de Ribadeo o Eo. Recomiendo hacer la ruta de casa indianas (Ruta de los indianos, aquí más información), todas ellas alucinantes. Además se puede comer a lo largo de la misma ruta porque coinciden las calles de dicha ruta con las de la zona comercial y de restauración. También recomiendo tomar un ferry para hacer un mini recorrido por la ría y se acerca a los pueblos del lado asturiano (auténticas bellezas), que son Castropol y Figueras. Cuesta entre 5 y 8 euros por persona y el recorrido dura entre 30 y 40 minutos.

Playa de las Catedrales y alrededores: originalmente llamada “Playa de Aguas Santas”, pero popularmente conocida (y posteriormente adoptado) con el nombre de Playa de las Catedrales porque tiempos atrás las enormes formaciones rocosas recordaban a estos edificios. La playa pasa gran parte del día con la mar alta, y por tanto cubierta de agua, y solo se puede visualizar desde un mirador que hay en la entrada (donde hay un restaurante).

Para acceder con la marea baja (suele ser una vez por la mañana muy pronto prepárate para madrugar- y otra por la noche), has de reservar visita. En efecto se han limitado los accesos diarios para seguridad de los visitantes (por la subida y bajada de las mareas, falta de espacio, etc.) y principalmente para cuidar del entorno y del medio ambiente, en esta página puedes directamente reservar online clicando aquí.

En la zona de la playa de las catedrales hay varios campings para alojarse, un solo hotel (Hotel Playa de las Catedrales, que te dará las entradas a la playa siempre que desees durante tu estancia), y pocas opciones de restauración (una pulpería en una carpa que se coloca en los meses del verano, y un restaurante en el mirador). El restaurante es el ”Bar Restaurante Playa de las Catedrales”,  aquí podéis ver opiniones en Tripadvisor (entre ellas la de El Turista Curioso).

El resto de playas son una mezcla de arena fina y roca. Esta costa es extremadamente fría incluso en verano, así que pocas veces podrás bañarte e incluso será difícil mojar los pies.

 

 

La Playa de las Catedrales y las aledañas tienen un “paseo marítimo” de madera muy bonito, pero le falta acondicionamiento y luz durante la noche. Si te quieres dar un paseo ten cuidado de no alejarte demasiado de la zona del hotel , las casas y el camping, porque no hay ninguna luz para guiarte.

Esta playa es una de las más bonitas que se pueden ver nunca, y la sensación de que, una vez en ella,  la marea comience a subir mientras te quedas “encerrado” (y debes salir deprisa antes que la marea suba en exceso) es una sensación que jamás había experimentado en ninguna otra playa.

Esta zona, como he comentado, tiene poco alojamiento turístico, pocos apartamentos u hoteles y las principales formas de alojarse cerca es en el hotel anteriormente comentado, pero también podrás encontrar alguna casa rural u hoteles más alejados (en otros municipios colindantes o en la población de Ribadeo) o en pequeñas casas rurales.

Esta ausencia de explotación turística es la que da un carácter especial a esta costa, ya que da la sensación de estar en un país de norte de Europa con menos “masificación” de visitantes.

El pueblecito pesquero Rinlo: es un pueblo costero pequeño situado entre Ribadeo y la Playa de las Catedrales. Es complicado llegar a él porque las carreteras de acceso al centro son estrechas, pero merece la pena visitarlo. Tiene un pequeño puerto desde el que uno puede imaginar cómo arribaban los barcos hace décadas (ahora abandonado), también posee un mirador muy bonito desde el que apreciar la costa. Para comer o tomar algo, destaca el restaurante “azul” al lado del puente (el edificio más vistoso de ese lado del pueblo), que se llama “A cofradía de Rinlo”, aquí valoraciones en tripadvisor: 

Foz: es otro pequeño pueblo costero que visitar, se ubica entre el mar y la ría de Foz, con la población de San Cosme al otro lado. Es recomendable su bonita playa de arena fina, y su puerto, que lo hacen muy pintoresco.

Los pueblos en el límite y en la parte asturiana: Castropol y Figueras son otros dos pueblos pintorescos, que como he comentado antes, se ubican en el margen izquierdo de la ría de Ribadeo y ya en la parte asturiana. Merece la pena acercase a ellos, tomarse una sidra y darse un paseo.    

Taramundi es el pueblo más bonito de las montañas de la parte occidental de Asturias. Es un pequeño pueblo de piedra, con empedrado y edificios de tejados de pizarra. Imprescindible ver en el pueblo los “castros”, que son ruinas de pequeñas poblaciones datadas en la Edad de Bronce. Aunque la parte más visible está cercana al pueblo, puedes pasear por los alrededores y descubrir que hay más ruinas a varios metros de distancia campo a través. Recomiendo reservar la comida, pues en épocas de verano es muy complicado encontrar sitio en los 4-5 restaurantes que tiene. También recomiendo acudir a la Oficina de Turismo, allí os pueden explicar varias rutas a hacer. 

La ruta más recomendable: acercarse en coche (o haciendo senderismo) a Teixois (Conjunto etnográfico), un pueblo cuya mitad está preservada desde el Siglo XVII, con pocos cambios (el molino, graneros, etc.), esta parte del pueblo se visita previo pago, pero la otra mitad (reconstruida), con el merendero y el bar sí es de libre acceso. Teixois está ubicado a 4 km de Taramundi. Es u buen lugar para disfrutar de un pueblo en lo alto de una colina llena de vegetación y donde poder disfrutar de una sidra en el bar. http://www.osteixois.es/

Ideas de viaje
Viajar por la zona en coche/alquilar coche: es  la forma más fácil de poder abarcar en unos días todos los pueblos y playas de la zona. Para alquilar un coche la cosa es más complicada, pues en el municipio de Ribadeo no hay muchas opciones, deberás alquilar un automóvil en Lugo capital, o en Vilalba, la segunda ciudad de la provincia, y  más cercana a la costa.
Bicicleta: es una posible modalidad de ruta por las playas, pero no es del todo recomendable porque la costa es muy irregular, no hay carril bici y los carriles de vehículos son estrechos y de un solo sentido.

Camping: puede ser una buena opción para disfrutar unos días de la Playa de las Catedrales, de Ribadeo y de todo el entorno que los rodea, pero deberás reservar con tiempo ya que los camping están, en general, repletos en temporada estival (junio, julio, agosto y parte de septiembre). Aunque es una forma cómoda de alojarse en esta zona (por la gran cantidad de campings que hay), sin embargo las lluvias, (también presentes en verano), hacen que la opción camping no sea la más conveniente. Aquí enlaces de algunos campings:

https://www.campingribadeo.com/

https://www.campingplayapenarronda.com/

https://www.booking.com/hotel/es/rinlocosta-camping.es.html

La costa de Lugo es una joya oculta de la costa de España, un lugar diferente, sin tanta infraestructura turística, lo que hace de este sitio un lugar original y diferente. La gestión que se hace de esta zona a nivel turístico trata de preservar el ecosistema y de evitar las saturaciones, aunque a veces sea difícil evitar la gran cantidad de turistas que acuden a lugares tan mágicos como la Playa de las Catedrales. Sin duda un sitio que hay que visitar en algún momento para comprobar que nuestro país no solo posee cálidas playas del Mediterráneo, sino que es mucho más diverso y rico.

El turista curioso: Eduardo Fernández Rosauro